Este 6 de mayo se cumplen tres años de uno de los capítulos más tristes y oscuros en la historia del Futbol profesional en la entidad: el descenso de Chiapas FC y el consiguiente fin del Futbol de Liga MX en el estadio Zoque.
La franquicia felina, propiedad del empresario poblano Carlos López Chargoy, emigró de San Luis Potosí a Tuxtla Gutiérrez en 2013 —tras la venta de Jaguares de Chiapas a Querétaro—, pasando de la ilusión con la que arrancan los nuevos proyectos al estrepitoso fracaso y desaparición.
Si bien nació bajo el nombre de Chiapas FC, el club retomó el mote de Jaguares para mantener el arraigo con la afición y sostuvo la plaza por tres años más en la élite del Futbol de Liga MX, aunque al final terminó por dejar huérfana a su afición y envuelta en el escándalo, al grado de que desapareció.
Dramático final
Tras pobres temporadas, en las que fue dirigido por técnicos como José Cardozo o Ricardo La Volpe, Chiapas FC llegaba al Clausura 2017 bajo las órdenes de Sergio Bueno y con la necesidad de sumar triunfos.
Para remediar las malas temporadas de antaño se reforzaron con jugadores de la talla de Moisés Muñoz, Felipe Baloy, entre otros.
La competencia por la salvación, que al principio incluía al Puebla y Veracruz, terminó por ser un mano a mano con Monarcas Morelia pero, para su mala fortuna, Chiapas FC se metió en una crisis de resultados en el decisivo Clausura 2017, sin la capacidad de ganar partidos en la recta final del torneo y cayendo dramáticamente hasta la última posición de la tabla porcentual.
En la última jornada, disputada el 6 de mayo de 2017, Chiapas FC requería de un doble milagro: ganar de visita al Atlas y esperar que Monarcas empatara o perdiera —en Morelia— contra Rayados. Con un golazo de Christian “El Hobbit” Bermúdez, que les daba la victoria sobre Atlas por 1-0, Chiapas FC tenía la mitad del milagro consumado y estaba a minutos de salvarse, pues en Morelia los michoacanos no pasaban del empate 1-1 contra Rayados.
Pero al minuto 91, el peruano Raúl Ruidiaz anotaría el gol de la victoria michoacana sobre Rayados (2-1), lo que haría sobrevivir a Monarcas en la categoría, consumando el descenso de la escuadra chiapaneca pese a la victoria en Guadalajara.
Problemas financieros
No obstante, el descenso de Chiapas FC no fue solo producto de los resultados en la cancha; mucho tuvieron que ver sus problemas administrativos. Pese que Carlos Hugo López Chargoy defendió los manejos financieros —y culpó a los patrocinadores por los atrasos en pagos a la plantilla—, la situación se fue tensando y provocó un distanciamiento que afectó el rendimiento del equipo.
En su momento, jugadores alzaron la voz para señalar los adeudos e incluso amagaron con no concentrarse para los encuentros, entre otras medidas presión hacia sus propios dirigentes.
En buena medida fue por ello que, tras los constantes escándalos que envolvieron a la franquicia, el 8 de junio de 2017 los dueños de la Liga MX acordaron la desaparición del club, que no podría participar ni en el Ascenso MX, categoría a la que había descendido deportivamente.
Adiós a la Liga MX
Tras consumarse el ascenso y desaparición de Chiapas FC, se terminaron también 15 años de Futbol de primera división en el estadio Zoque.
Si bien la historia de esta plaza en Liga MX comenzó con la franquicia de Jaguares de Chiapas (en junio de 2002), hay que considerar aparte los cuatro años que aportó Chiapas FC a partir de 2013, cerrándose el ciclo en mayo de 2017, tiempo en el que Chiapas fue testigo de 30 torneos cortos, logrando llevar a la afición a nueve Liguillas, pero sin lograr algún título en su historia.