El secretario de Salud del estado, doctor Pepe Cruz, destacó que a más de un año de haber entrado en funcionamiento, la Clínica de Emergencias Mentales para la Adolescencia (EMA) del Hospital Regional “Dr. Rafael Pascacio Gambia” de Tuxtla Gutiérrez ha logrado conformar una red de atención especializada para la prevención del suicidio y la detección oportuna de conductas de riesgo.
Al respecto, el funcionario estatal mencionó que esta denominada “red de vida” está integrada por diversas áreas de la Secretaría de Salud, el Sistema DIF Chiapas y la organización no gubernamental Médicos del Mundo, instancias que se encargan de detectar, atender y referir a usuarios y usuarias que requieren servicios psicológicos y psiquiátricos.
Indicó que por parte de la dependencia a su cargo participan la Unidad de Género y Salud, los Servicios de Atención Integral para las Mujeres, el Servicio de Atención Integral Hospitalaria, las unidades de especialidades médicas (Centro Integral de Salud Mental y Prevención del Suicidio, Centro Comunitario de Salud Mental y Adicciones, y Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en Sida e Infecciones de Transmisión Sexual), el Hospital Psiquiátrico “San Agustín” y los centros de salud Terán, Tuxtla, El Valle y Copoya.
El doctor Pepe Cruz señaló que para la identificación oportuna de conductas de riesgo y prevención del suicidio se creó un formulario de intervención en crisis, el cual permite detectar rasgos de depresión, ansiedad y suicidio, mediante una primera valoración a los pacientes.
Agregó que la Clínica EMA brinda atención especializada a la población adolescente a través de las líneas de emergencia 967 165 57 38 y 967 114 43 57, así como de manera presencial.
Detalló que tan sólo en el primer año de actividades se atendieron un total de mil 382 llamadas, de las cuales 596 fueron derivadas de una crisis suicida, por lo que se realizó contención emocional y se brindaron los primeros auxilios psicológicos; 686 llamadas fueron para solicitar orientación por conductas de riesgo observada en familiares, dando información acerca de los factores y señales de riesgo, y los primeros auxilios psicológicos que se pueden aplicar desde casa; y 100 llamadas fueron para orientación.
En tanto que de manera presencial se otorgaron 634 atenciones psicológicas especializadas, de las cuales 510 fueron para adolescentes, 104 para población mayor de edad y 20 fueron de postvención para familias sobrevivientes del suicidio.