La “pausa” que han puesto las autoridades de Transporte en el estado para comunicar a la población el aumento al pasaje (entre 1.0 y 1.5 pesos) está generando preocupación en el sector, toda vez que se esperaba que la modificación se haría en los primeros días de febrero, puntualizaron los integrantes de la Alianza del Autotransporte en el Estado de Chiapas.
Los transportistas no han establecido una cantidad ideal para el costo de la tarifa, pero sí exhortan a que los representantes de las instancias gubernamentales revisen las condiciones económicas del gremio, “está bastante lastimado, en algunas regiones, inclusive, quebraron algunas modalidades”.
Mario Bustamante Grajales, dirigente de la organización, dijo que el secretario de Movilidad y Transporte, Aquiles Espinosa, había informado de que se iba a dar el aumento al pasaje, “no sé por qué no se ha dado, es una decisión nada fácil pero sí urgente para el sector que vivimos y trabajamos en el transporte”.
Alargar más la decisión, coincidieron transportistas, provoca inquietud en todo el gremio, tomando en cuenta que ya se había hecho un compromiso y, en caso de que no cumpla, vendría un tema de incertidumbre.
En enero pasado, el titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT), Aquiles Espinosa García, informó que el ajuste del pasaje se estaría dando en febrero, con un posible alza de un peso.
Sin embargo, aclaró que aún se estaba en proceso de concluir bien los estudios y posteriormente se le estaría informando a la población de los motivos de este incremento.
Al sector transportista no sólo le preocupa el tema tarifario, también la anarquía que ha existido en el gremio y en la parte institucional, debido a que hay grupos de poder que buscan posicionarse previo a la entrega de las concesiones.
El líder del sector recordó que hace cuatro meses presentaron un estudio a las autoridades; en ese documento mostraron un balance de lo que a decir de los transportistas requieren para equilibrar sus finanzas.
A los transportistas se les ha demandado por parte de los usuarios, renovar sus unidades, capacitar a los choferes, así como el de respetar los límites de velocidad, este último debido a los accidentes en que se ven involucrados diversas rutas.
En contraste, los transportistas han argumentado que llevan años con la misma tarifa, cuando las refacciones así como el combustible han ido en aumento en cuanto a sus costos.
Uno de los aspectos que han salido a relucir en las últimas semanas, remarcaron, es que existen algunos líderes del sector que ya están comprometiendo concesiones cuando, ni siquiera, se han presentado resultados de los estudios de factibilidad; en caso de que no se presenten los diagnósticos, la repartición de permisos también generará dudas.
“Yo me sumo al esfuerzo que se haga para consolidar nuestro estado; en materia económica sí nos golpea -el retraso a la nueva tarifa- y esperamos que pronto se dé el anuncio”, puntualizó.